Estoy leyendo un libro que empieza así (traducción mía):
El escándalo de la mentalidad evangélica es que no hay algo como una mentalidad evangélica. Podemos encontrar un extraordinario cúmulo de virtudes entre la extendida masa de protestantes evangélicos en Norteamérica. […] Sin embargo, los evangélicos americanos no son ejemplares en su pensamiento y no lo han sido por varias generaciones.
[…] «Por una parte, hay un enorme crecimiento de la Iglesia, por el otro, es casi completa su falta de influencia [en la sociedad]».
Mark A. Noll; The Scandal of the Evangelical Mind
Ya veremos cómo sigue.
que vais a decir vosotros,los primeros sectarios…en fin,Dios pondra a cada uno en su lugar